Ruta de ciclismo Costa de Oleiros – Sada

Esta ruta es bastante corta y quizás al ciclista local se le quede corta, pero transcurre por algunas zonas que es obligatorio conocer por su belleza paisajística y sus carreteras perfectamente adecuadas al ciclismo y llamará la atención del visitante estacional que desee salir con su bici y hacer algo que no lleve mucho tiempo y le permita tener un buen ejemplo de cómo son realmente los alrededores de la ciudad.

Datos aproximados:

– Distancia: 35 km.

– Desnivel positivo: 533 metros.

– Altitud máxima: 159 metros.

La ruta

La salida

Saldremos de la ciudad por el Puente del Pasaje, su principal punto de entrada y nexo de unión con la comarca. Una vez lo completemos necesitaremos abandonarlo hacia la izquierda dirección Santa Cristina, así que nos tocará hacerlo por el carril del medio. Esta maniobra puede resultar un poco peligrosa teniendo en cuenta la cantidad de coches que circulan por el puente y la velocidad que llevan algunos (a pesar de estar limitada 50 km/h), pero una vez lo consigamos casi podemos decir que el único “peligro” de toda la ruta ya ha pasado.

Una vez en Santa Cristina no volveremos a tomar ningún desvío hasta que lleguemos a nuestro objetivo, Sada, así que mirada al frente y a disfrutar.

Pedaleando por la Costa de Oleiros

Tras salir de Santa Cristina por la rotonda del Che Guevara se abre un carril bici (dividido en dos secciones bien diferenciadas) que nos permitirá circular por él hasta la entrada de Santa Cruz, atravesando Bastiagueiro.

La primera parte es realmente peligrosa y no recomendamos utilizarlo: transcurre compartiendo plataforma con los peatones (lo cual siempre suele ser negativo) pegado al bordillo de una acera relativamente alta y por un tramo de bajada bastante pronunciada; además está lleno de pasos de peatones y cruces ciegos en los que ni los ciclistas vemos a los coches ni los coches nos ven a nosotros. Yendo por la carretera alcanzaremos velocidades bastante elevadas, así que podremos seguir perfectamente el ritmo del tráfico de vehículos hasta que lleguemos a la rotonda de la playa de Bastiagueiro. 

Aquí se inicia la segunda parte del carril bici, que aunque vuelve a compartir plataforma con peatones, en este caso transcurre por un tramo de subida, lo que casi elimina cualquier tipo de peligro. Pese a que no es muy ancho y suele estar lleno de hojas y pequeñas ramas de árboles se circula bastante bien por él y está separado de la calzada por una línea de árboles.

Al finalizarlo iniciaremos la bajada hasta el propio pueblo de Santa Cruz, que atravesaremos rápidamente (cuidado con los todos los coches que se paran en mitad de la carretera para coger desvíos sin poner los intermitentes, porque iremos a una buena velocidad) y empezaremos a alejarnos de la costa temporalmente.

Hacia Mera

Desde Santa Cruz hasta Mera hay algo más de 5 km, de los cuales los 4 primeros serán en constante subida. Los porcentajes no superan el 4 ó 4.5% en ningún momento, y exceptuando la zona boscosa que hay casi tan pronto ponemos la bici fuera del núcleo de Santa Cruz, el resto del tiempo no hay la sensación “visual” de estar subiendo, aunque las piernas sí lo notan.

Cuando salimos de dicha arboleda empezaremos a circular por una recta con una serie de alcantarillas bastante peligrosas, por lo que hay que estar atento a ellas y circular un poco más hacia el centro del carril de lo habitual. Siguiendo este tramo volveremos a la costa y desde allí comenzaremos un rápido descenso hasta plantarnos en el centro de Mera.

*A tener en cuenta: Desde hace un par de años existe una especie de carril bici entre Santa Cruz y Mera. Decimos “especie” porque en todo momento está saltando de un lado a otro de la carretera, la mayor parte del tiempo no es más que una acera sin apenas división ciclista/peatón y en algunas zonas desaparece por completo.

Puede funcionar si se va de paseo con la familia, pero no hay ninguna razón para arriesgar el físico haciendo deporte por él. Creemos que es importante saber esto porque desde que se abrió algunos conductores han empezado a pitar a los ciclistas y quejarse de nosotros porque seguimos circulando por la carretera. Al ser Mera una importante zona de playa, el tráfico es muy abundante en verano y algunos fines de semana de buen tiempo de primavera u otoño, pero el resto del año es bastante ligero.

Cambiando de costa camino de Sada

Mera, con su playa y sus terrazas, es un buen sitio para parar unos minutos y tomar un café al lado del mar, pero si lo que se quiere hacer es seguir en la bici, basta con continuar la carretera principal de salida, que tras llevarnos a la costa este de la península de Oleiros nos acabará dejando en Sada.

La salida de Mera empìeza con falsos llanos picando siempre un poco hacia arriba, hasta que un par de kilómetros más adelante, en la zona de Aba, se convierten en un buen repecho de aproximadamente 1 km que llega a alcanzar por momentos el 8% de desnivel. Este segmento es bastante puñetero, pues es en total línea recta y en ningún momento da la impresión de que realmente sea tan duro, por lo que uno no entiende por qué no consigue avanzar. Al final, habrá muchos que decidan cambiar al plato pequeño e ir más cómodos con mayor cadencia aunque con menos velocidad.

Una vez terminado y alcanzado el pueblo de Lorbé ya todo será llano o cuesta abajo hasta la entrada de Sada. Cabe destacar la zona de Carnoedo, que gracias a sus rectas y su llano ligerísimamente descendente permitirá sacar el máximo partido de las bicis aero si nos sentimos con fuerza.

Sada e iniciando la vuelta

Sada es un punto ciclista muy conocido, pues por allí pasan muchísimas rutas que vienen desde Coruña y es la puerta de entrada tanto al norte (zona de Miño y Pontedeume)  y al sureste (Betanzos y su comarca). Además, tiene lugares y variedad de sobra para tomar café o incluso comer, por lo que es el sitio perfecto para tomarse un descanso o recargar fuerzas y alimentos.

En nuestra ruta cogeremos el camino de vuelta a Coruña, pero tened siempre en cuenta que desde aquí, sobre todo a través de la salida de Bergondo, podréis ir a cualquier parte y eligiendo muchas opciones distintas. 

Para iniciar el camino de Coruña tomaremos la entrada principal de la villa, que la conecta directamente con el núcleo de Oleiros. Es una carretera que tiene siempre relativamente tráfico, pues toda la gente que trabaja en Coruña (algo así como la mitad de la mitad de los habitantes) la cogen a todas horas del día, pero en ningún momento es peligrosa ni requiere una atención o precaución especial. Además, al ser una zona habitual de ciclistas, los conductores ya están acostumbrados a vernos y respetarnos.

Más nos vale habernos preparado bien antes de iniciar el camino de vuelta, porque lo que nos espera hasta Oleiros es inesperadamente duro. Una vez salimos a las afueras, la carretera empieza a ascender poco a poco  hasta convertirse en un importante repecho, que al final resulta tener unos 3 km al 5% de desnivel, con zonas que llegan incluso al 8%. A esto hay que añadirle que la carretera es ancha, con arcenes practicables, buen asfalto y varias rectas de más de 500 km, por lo que la sensación de no avanzar se acentúa todavía más.

Si se tiene fuerza (o se va en grupo) se puede mantener el plato grande hasta el final, pero si alguien no tiene un buen día o viene ya un poco tostado de antes acabará con el pequeño y una corona de un buen tamaño, haciendo metros muy despacio.

Desde Oleiros hasta A Coruña

Tras subir desde el nivel del mar hasta los 159 metros desde que salimos de Sada llegamos por fin a Oleiros, donde se terminan las subidas y prácticamente todo el camino de vuelta es cuesta abajo. Seguiremos la carretera que nos traía de Sada y que nos dejará casi en la entrada de Coruña durante unos 6 km en los que realmente no hay nada destacable y que a veces pueden hacerse un poquito pesada, pero al menos sabremos en todo momento que cada pedalada que damos nos acerca más a nuestro destino.

Cuando lleguemos a la mini rotonda de Perillo, cogeremos a la izquierda para dirigirnos a los últimos metros de la Nacional VI y desde allí simplemente avanzaremos hasta el Puente del Pasaje, donde habíamos iniciado el camino. 

Suerte en la vuelta a casa y buen provecho.

En caso de querer más

Como decimos más arriba, Sada es un punto desde el que se puede ir prácticamente a cualquier parte. Si salimos por la carretera de Samoedo y el Castro podremos dirigirnos hacia el polígono industrial del Espíritu Santo (en la rotonda de la ITV), que nos llevará a la zona de Cecebre o Cambre

Si por el contrario salimos por Bergondo, una vez alcancemos la rotonda de San Isidro (hay que hacer varios kilómetros y pasar una buena subida para ello) tendremos la opción de ir hacia Miño (a la izquierda), hacia Betanzos (recto) o hacia Guísamo (derecha).

¿Interesado en otras rutas? Echa un vistazo a esto: